Investigan gastos de hasta $88.000 millones en limpieza en el último año del gobierno de Alberto Fernández
Las auditorías, en este caso, se realizaron en todas las reparticiones del Estado, es decir, en todos los organismos públicos: desde los ministerios más importantes hasta los pequeños entes.
“Las conclusiones del informe son terribles”, indicó una fuente de la SIGEN, tras el conocimiento del informe final de diciembre, al que tuvo acceso TN, que determina cinco puntos claves y que Presidencia ya tiene en su poder:
- Cartelización: el servicio de limpieza se concentró en 10 proveedores, de las 355 empresas de limpieza empleadas. Este grupo reunió el 61,78% del monto total de contrataciones y se pudo constatar la repetición de autoridades en el directorio de más de una compañía.
- Controles insuficientes en la prestación del servicio: no se realizó un registro del presentismo y del cumplimiento del personal. En el 20% de los casos no se tomó asistencia de los empleados y en el 21% no se verificó si se cumplió con el horario laboral designado.
- No hubo un criterio uniforme para determinar los costos de las empresas. Algunas se manejaban con el dato del IPC, otras con el Índice de Precios Mayoristas y con paritarias sectoriales o sindicales. Sin embargo, esto solo ocurrió en 861 contratos, los restantes 447 convenios se firmaron con “otras” modalidades no especificadas. Esto representó un 52% del total.
- Existió una falta de control en el cumplimiento de los aportes jubilatorios, retenciones y ART. Algunas de las empresas involucradas aún se manejan con el decreto 332/2020 de la gestión de Fernández, que creó el Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción para empleadores afectados por la emergencia sanitaria en la Pandemia. La resolución determinó que cada empleador podía reducir o postergar hasta el 95% del pago de contribuciones patronales al Sistema Previsional Argentino.
- No todas las contrataciones se realizaron con documentos licitatorios modelo. Un 27% fue a través de licitación pública, pero las restantes se efectuaron mediante concursos privados, contratación directa, legítimo abono, licitación privada, concurso público, subasta pública y compulsa de precios, entre otras.