💥 La interna libertaria estalla: Macri desafía a Milei y Adorni acusa recibo
El gobierno libertario atraviesa su primera gran crisis política tras la renuncia de Guillermo Francos. La llegada de Manuel Adorni a la Jefatura de Gabinete no solo generó dudas dentro del propio oficialismo, sino que reactivó una interna con Mauricio Macri que ya nadie oculta.
El expresidente, que había intentado recuperar protagonismo tras la cena en Olivos, salió a cuestionar el nombramiento de Adorni por “falta de experiencia”. Pero el flamante jefe de ministros no se quedó callado: lo tildó de “injusto” y deslizó que Macri desconoce los deseos de quienes propone para ocupar cargos.
La respuesta fue más que un gesto: fue un portazo al tutelaje político que Macri intenta imponer sobre la gestión de Javier Milei. Detrás de las formas diplomáticas, hay una disputa real por el poder. Macri quiere que su gente ocupe lugares clave; Milei busca demostrar que ya no depende de nadie.
En el medio, Adorni —hasta hace unos días vocero— pasa de leer comunicados a manejar un gabinete que cruje por dentro. Su debut llega en un contexto tenso: renuncias, desconfianza entre los aliados y un gobierno que intenta mostrar autoridad, aunque sus cimientos se muevan al ritmo de los egos.
La incorporación de Diego Santilli al Ministerio del Interior busca dar aire político a una administración que se quedó sin sus principales nexos con los gobernadores. Pero el daño ya está hecho: el “ciclo cumplido” de Francos fue también el fin de la breve tregua entre Milei y Macri.
Mientras tanto, el Presidente insiste con su agenda de reformas y se aferra al respaldo de Washington. Pero la política interna se desangra, y la tan prometida “casta afuera” parece hoy más viva que nunca… dentro del propio Gobierno.