Pese al escándalo ANDIS, una empresa investigada vuelve a licitar y el obierno mira para otro ladoo
Mientras la causa ANDIS sigue revelando entramados de corrupción y presunto pago de coimas, la droguería Suizo Argentina —investigada y allanada por la Justicia— volvió a presentarse sin problemas en una licitación pública, como si nada hubiera ocurrido.
La empresa de la familia Kovalivker, mencionada en los audios atribuidos al ex titular de ANDIS, Diego Spagnuolo, compite ahora por un contrato del Hospital Posadas para insumos de alta complejidad destinados a cardiopatías infantiles.
Un contrato anual con posibilidad de prórroga, y por montos millonarios.
No es la primera vez.
Este año, Suizo Argentina ya había cerrado dos de los contratos más grandes de su historia con el Estado:
- 78.267 millones de pesos con el Ministerio de Salud
- 15.393 millones con el Hospital Posadas
Esto explica el explosivo crecimiento de la empresa entre 2024 y 2025, aun estando bajo investigación judicial.
Lo más grave es que, pese a los allanamientos ordenados por el fiscal Franco Picardi a oficinas, domicilios y directivos, la firma sigue siendo tratada como un proveedor “normal”, sin suspensión preventiva, sin restricciones y sin señales de que el Estado quiera poner un freno.
La investigación incluso cambió de rumbo y dejó a Suizo Argentina temporalmente al margen de los focos, mientras se amplía a otras compañías. Pero el trasfondo es el mismo: contratos públicos gigantes, sobreprecios y un Estado que, en vez de extremar controles, habilita una puerta giratoria donde todo continúa como si no hubiera escándalo.
La pregunta cae sola:
¿Cómo puede ser que una empresa señalada por coimas en un organismo nacional siga compitiendo por fondos públicos sin que nadie del Gobierno levante la mano?