Con Milei cerraron más empresas que en la pandemia: la motosierra arrasó con 223.537 empleos
La motosierra prometida como símbolo de “libertad económica” terminó siendo una guillotina para el trabajo y la producción.
Según los propios datos oficiales, en apenas 18 meses de gestión de Javier Milei cerraron más empresas que durante la crisis mundial del coronavirus, un hecho sin antecedentes en la historia reciente del país.
En total, 15.564 pymes bajaron las persianas desde noviembre de 2023, superando a las 15.398 que cayeron durante la pandemia. El saldo fue letal: 223.537 empleos formales destruidos, un récord negativo que desnuda la magnitud del colapso.
Los sectores más castigados fueron el corazón del empleo argentino:
- Administración pública, defensa y seguridad social: –98.600 puestos.
- Construcción: –80.873 puestos.
- Transporte y almacenamiento: –54.935 puestos.
- Industria manufacturera: –39.016 puestos.
Mientras tanto, la receta libertaria de apertura importadora, tasas imposibles, inflación en dólares y desplome del consumo hizo lo que ni la pandemia había logrado: destruir la columna vertebral del tejido productivo.
La motosierra contra los trabajadores
La promesa de “dinamitar la casta” se transformó en una demolición del salario y la estabilidad laboral. Hoy más de 2,1 millones de argentinos dependen del monotributo como principal fuente de ingreso, un parche de precarización que crece al calor de la Ley Bases y la reforma laboral que blanquea la contratación sin derechos.
Lejos de generar empleo privado, la gestión Milei hundió a las pymes –el 99,7% de las empresas destruidas eran pequeñas y medianas– y al mismo tiempo multiplicó la incertidumbre.
Las paritarias quedaron planchadas, los asalariados se ven obligados a buscar segundos trabajos y el acceso al crédito es una quimera por las tasas usurarias que impone el propio Gobierno.
Una crisis que ni la pandemia provocó
El informe del CEPA es contundente: en términos de empleo registrado, la caída bajo Milei ya supera a lo ocurrido en la pandemia y durante el macrismo.
A esta tragedia social todavía falta sumarle el impacto de la última devaluación, la suba descontrolada del dólar en agosto y las consecuencias de los escándalos de corrupción que sacuden al círculo íntimo del Presidente.
En otras palabras: con Milei, la motosierra no cortó privilegios, cortó trabajo.